Skip to main content


Se acaba un año cargado de momentos, recuerdos, experiencias, sueños. De lágrimas y sonrisas. De abrazos, besos y miradas. De peleillas tontas. De decepciones, errores y fallos. De cuestas hacia arriba y metas alcanzadas. De los de siempre. Los que ya estaban y los que vinieron para quedarse.
Espero que hoy, 31 de diciembre, puedas echar la vista atrás y sentirte orgulloso de lo que has hecho, de lo que has sido. Espero que hayas crecido como persona y que hoy seas un poquito mejor. Que hayas hecho lo que querías hacer y te hayas valorado cada día un poquito más. Espero que hayas soñado fuerte y hayas cumplido sueños, y si aún hay alguno en el aire, espero que tengas la fuerza suficiente para ir a por él en el año que entra. Espero que hayas querido, mucho, con ganas, con pasión. Fuerte. Pero sin romper. Y que te hayan querido como te mereces. Espero que te hayas dado cuenta de quién sí, quién no, quién siempre y quién nunca. Pero sobre todo quién de verdad merece la pena y con quién hay que sacar tiempo aunque sea un poco. Espero que hayas cometido errores, te hayas equivocado y hayas tenido fallos, pero que hayas sabido aprender de cada una de esas cosas. Que hayas sido tú en cada paso que has dado, digan lo que digan. Espero que hayas vencido miedos y que hoy seas un poco más valiente. Que hayas sabido levantarte y seguir adelante a pesar de lo que sea. Espero que este año haya merecido la alegría, y no la pena. Y que a pesar de sus más y sus menos, hayas sido feliz. Muy feliz. Recuerda que lo bueno siempre vale mucho más y que si nos fijamos bien, hay muchas cosas por las que sonreír.
Espero que estés dispuesto a cerrar este año y comerte con patatas el que viene. Y como siempre digo, espero que lo bueno de 2019 solo sea lo malo de 2020.

Comments

Popular posts from this blog

Uno no elige de quién se enamora, es algo así como o un tablero en el que sacas y la casilla donde caigas te acabará marcando para siempre. Destino, azar, suerte, cada uno lo llama como quiere y yo simplemente lo llamo amor. Porque hasta de quien menos te lo esperas puedes llegar a sentir cosas, hasta de quien no creías que era para ti pueden salir grandes historias para el recuerdo… No te engañes, o fuerces al amor porque llega cuando menos te lo esperas y se va cuando más dabas por ese alguien. Impredecible, incoherente….y uno no lo elige. Somos sus marionetas, estamos a su servicio, y joder, ojalá poder estar siempre bajo su mando porque te prometo, que cuando te enamoras de verdad la vida cambia a mejor….y no te deja indiferente. Yo no elegí enamorarme de ti, lo prometo. De haberlo sabido habría ido preparada con chaleco salvavidas para no ahogarme antes de tiempo y con escudo de hierro para que no me rompieras en mil pedazos. Pero la vida es así y me enamoré sin que

Dicen que recordar es volver a vivir, pero no siempre se cumple

“La vida me enseñó que los mejores planes surgen sin planearlos, las mejores personas llegan sin buscarlas y el mejor abrazo siempre es el inesperado. Me hizo ver que puede haber mil miradas, pero llega una y, a la primera te cambia la vida.  Comprendes que la vida sólo hay que vivirla, que lo que tenga que venir encontrará el camino para llegar. La importancia de darle valor a lo importante y olvidarme de lo que no vale la pena. Vivir, simplemente vivir, la vida ya me hizo ver que los planes los hace ella”. Texto: Sergio Rubio. #yoymismildefectos #depaseoporlos30

sOy Un DeSAsTre, y eso es lo mejor que tengo para ofrecer..,

  sOy Un DeSAsTre, y eso es lo mejor que tengo para ofrecer.., Mario Benedetti dijo una vez que tenia la teoría, de que cuando una persona lloraba, no lo hacia por lo que lloraba, si no por todo lo que llevaba acumulado, y no lloro en su momento. Yo quiero creer que es cierto, porque el auto-engaño a veces es la mejor medicina, o mejor dicho, es un ARTE, que pocos tienen. En el fondo el autoengaño, nos impide ser felices,  Cuando una relación no funciona a veces nos autoengañamos porque queremos seguir teniendo amor, aunque en el fondo seamos conscientes de que nos está haciendo daño. Ser realistas nos permite tomar las decisiones que más nos convienen...